Milgen Soto y tres años de impunidad

Milgen Idan Soto Ávila es el último de los indígenas asesinado por defender el bosque y el territorio Tolupán como integrante del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia. Hoy se cumplen tres años de su desaparición forzada que culminó con el asesinato y entierro en una fosa clandestina justamente en el lugar a donde el empresario Wilder Domínguez desarrollaba el corte ilegal del bosque en la tribu San Francisco Locomapa.

Milgen fue asesinado por oponerse al saqueo del bosque en su tribu ubicada en el departamento de Yoro, Honduras. Unos días antes había asistido a la audiencia contra nueve de sus compañeros y compañeras indígenas al juzgado de su comunidad, donde con pancarta en mano, denunció el crimen ambiental que se estaba cometiendo en una de las comunidades de la tribu.

Su clamor por Justicia hacia sus hermanos y hermanas indígenas no fue escuchado por la parcializada justicia yoreña y mucho menos a su denuncia les prestaron importancia.

Tras cinco días de desaparición Milgen fue encontrado enterrado en una fosa común el 28 de septiembre de 2019, su cuerpo presentaba un disparo que le causó daños en su corazón y pulmones, de sus homicidas no hay paradero, se han presentado diferentes acciones legales solicitando avances en las investigaciones, pero el Ministerio Público y las demás instituciones parece que no tienen el más mínimo interés en resolver el caso.

En memoria de Milgen la lucha continua en la tribu San Francisco Locomapa donde a pesar de la parcialización de los funcionarios públicos, la resistencia indígena no se rinde, ni se detiene, confiando en que la construcción de la verdadera soberanía nacerá del pueblo y para el pueblo.

En este tercer año de impunidad, desde el MADJ exigimos a los funcionarios, respuestas por este y otros crímenes contra luchadores y luchadoras sociales, pero en especial para los luchadores y luchadoras indígenas.

Sentencia de la corte: Una victoria del pueblo Tolupán, de beneficio para todos los pueblos originarios de Honduras

13 de julio,2022 – San Pedro Sula. La comunidad indígena Tolupán de San Francisco de Locomapa (SFL), Yoro, logró que la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia confirmara el fallo emitido en febrero 2021 por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de SPS en donde se reconoce la violación a sus derechos por parte de las autoridades municipales de Yoro al negarles, por motivos de discriminación y sectarismo político, acceso a recursos de alimentación y salud.

El 28 de abril de 2020, el Consejo Preventivo de la Tribu SFL, el MADJ, el Bufete Estudios para la Dignidad y FUNDAMBIENTE interpusieron una Acción de Amparo para que las autoridades de la Municipalidad de Yoro restituyeran el derecho a la alimentación y a la salud de toda la población de SFL sin ningún tipo de discriminación, luego de comprobarse que la municipalidad llegó a la Tribu, en los primeros meses de la pandemia del COVID, a distribuir alimentos y servicios de salud en el marco del programa Honduras Solidaria, pero lo hicieron únicamente a  personas y familias afines políticamente a la Corporación Municipal, discriminando a todos los liderazgos que tienen una historia de lucha por sus derechos humanos y por sus bienes naturales y territoriales.

El 5 de febrero de 2021, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de San Pedro Sula falló a favor del amparo presentado por el pueblo Tolupán y ordenó, entre otras cosas, que la municipalidad debía elaborar un Plan de Acción Permanente para garantizar el derecho a la alimentación y facilitar de manera inmediata asistencia médica a todos los miembros de la Tribu para atender las afectaciones biológicas-nutricionales derivadas de la violación a su derecho a la alimentación. Además, obliga a reconocer al Consejo Preventivo de la Tribu San Francisco de Locomapa como un actor válido en la comunidad.

En mayo de 2021, la Corte de Apelaciones de Tegucigalpa revocó dicha sentencia indicando que no había indicios suficientes para la presunción de que las entregas de ayuda alimentaria y servicios médicos integrales se hubieran realizado de manera selectiva y discriminatoria. El 4 de junio de 2021, a petición del pueblo Tolupán, se solicitó consulta sobre este fallo a la Sala de lo Constitucional.

Un año después, el 10 de mayo de 2022, la Sala de lo Constitucional falla e indica que es procedente otorgar la garantía de Amparo al pueblo Tolupán y ordena nuevamente a la Corporación Municipal de Yoro a “respetar, proteger y promover los derechos económicos, sociales, culturales y a la participación de la Tribu Tolupán de San Francisco de Locomapa y particularmente, la garantía al derecho a la alimentación y a la salud de manera igualitaria”.

La importancia de la sentencia

La Acción de Amparo y la confirmación del fallo por parte de la Sala de lo Constitucional es importante porque genera un precedente en la exigencia pública para que termine la historia de hambre, discriminación y de abandono generalizado que vive la Tribu San Francisco de Locomapa, el pueblo Tolupán y todos los pueblos originarios en Honduras.

Es un fallo trascendental porque no permite seguir viendo como “normal” la historia de exclusión que, por décadas, sino son siglos, viven los pueblos originarios en Honduras y genera un precedente para que otros pueblos puedan también exigir el cumplimiento de sus derechos por parte de sus autoridades locales y nacionales.

En el marco del trabajo planteado desde el fallo del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de SPS, los tolupanes de SFL, junto a las organizaciones que respaldaron el Amparo: Bufete Estudios para la Dignidad (BED), el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ) y FUNDAMBIENTE, realizaron un pequeño censo socio económico en Locomapa que comprueban la realidad del marginamiento histórico y entre otras cifras nos indica lo siguiente:

  1. Que el 95% de la tribu SFL se encuentra en condiciones de pobreza
  2. El 43% de las familias en SFL, que son hogares en promedio con 5 personas, tienen ingresos mensuales menores a mil lempiras. En contraste el 93% de estos indica que nunca ha recibido ningún tipo de ayuda por parte de los programas de seguridad social del gobierno.
  3. El 68% de su población no sabe leer ni, escribir, y solamente 6 personas de toda la tribu registran estudios universitarios, y solo 26 personas (adultos mayores) hablan su lengua originaria el Tol.
  1. El 62% de los menores en edad de estudiar no lo hacen y el 73% de ellos refiere que no lo hace por falta de recursos y la necesidad de contribuir, a partir del trabajo, con ingresos para sus familias.
  2. SFL no cuenta con energía eléctrica, manejan su propio sistema de agua y el 51% de las viviendas tiene piso de tierra.

Es un fallo importante porque obliga a las autoridades a no discriminar, a no utilizar los recursos y los servicios públicos para hacer propaganda y satisfacer las necesidades únicamente de sus activistas políticos o con organizaciones afines a sus intereses.

Finalmente, la sentencia es importante porque, aunque el problema de hambre no se resuelve a partir de un fallo judicial y tampoco a partir de los proyectos asistencialistas del gobierno, si es un paso importante para valorar la dignidad y la tenacidad que existe en la lucha diaria de los pueblos originarios por defender sus derechos humanos, naturales y territoriales y en general por mantener la identidad cultural de todo un país.

Dado en San Pedro Sula a los 13 días del mes de julio de 2022.

Comunicado: “No más criminalización y despojo contra los pueblos indígenas de Honduras”

Nosotros y nosotras, integrantes de la tribu indígena Tolupan de Luquigüe, San Francisco Locomapa, ubicados en el Departamento de Yoro; integrantes del Pueblo Maya Chortí de la comunidad de Azacualpa, organizados en el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia y el Bufete Jurídico Estudios para la Dignidad nos hemos movilizado el día de hoy desde distintos puntos del país para pronunciarnos ante el Ministerio Público, instituciones del gobierno Central y a la población en general de la forma siguiente;

PRIMERO: Las comunidades indígenas en resistencia al despojo de nuestros bienes naturales ejecutado por el sistema extractivista que impera en nuestro país, constantemente hemos denunciado ante el Ministerio Público las amenazas, agresiones, corrupción y asesinatos de las que hemos y continuamos siendo víctimas, sin que hasta la fecha se haya presentado requerimiento fiscal en contra de nuestros victimarios.

SEGUNDO: Denunciamos que el actuar del Ministerio Público siempre ha sido diligente para presentar acusaciones contra nuestra, y muchas veces estas acciones se realizan con una simple y deliberada denuncia del empresariado y personas afines, es decir nuestros victimarios.

TERCERO: Repudiamos la falta de diligencias investigativas y el actuar abusivo de las y los funcionarios que nos han condenado en los últimos años múltiples procesos judiciales, limitando nuestros derechos a la organización, movilización y resistencia comunitaria, más daños psicológicos, sociales, económicos y morales.

CUARTO: Denunciamos que la Fiscalía Especial de Etnias nuevamente pretende abrir un proceso judicial en contra de nuestros compañeros de la Tribu Tolupan de Luquigüe, a quienes citó a comparecer este día, en calidad de investigados, sin indicar con precisión los hechos y el delito por cual supuestamente están siendo sometidos a investigación.

La Fiscalía de Etnias, conoce al menos de 10 denuncias que el pueblo Tolupan ha interpuesto en catorce años de existencia del MADJ, en los que la fiscalía ha presentado únicamente un requerimiento fiscal. Se ha convertido en parte del círculo de impunidad e inoperancia del Ministerio Público, incapaz de satisfacer de justicia y perseguir a los responsables de las agresiones al pueblo Tolupan. Para la Fiscalía de Etnias, el pueblo Tolupán no existe. Repudiamos que aparezca ahora investigando a hermanos tolupanes de Luquigüe que dignamente defienden los derechos de su tribu.

QUINTO: Denunciamos que el Ministerio Público y en Especial esta Fiscalía de Etnias ante la situación de violencia que se está viviendo en la comunidad de Azacualpa producto de las detonaciones realizadas por la empresa MINOSA  y la destrucción del cerro del Cementerio, no ha realizado ni una sola diligencia investigativa para esclarecer los hechos y detener las violaciones de derechos en contra del pueblo Maya Chortí, permitiendo que se continúen las acciones arbitrarias y abusivas de la empresa minera Aura Minerals.

SEXTO: Manifestamos que es una obligación del Estado garantizar los derechos a todos los ciudadanos y especialmente a los pueblos indígenas que históricamente hemos sido víctimas de la violencia, el saqueo de nuestros recursos y el olvido institucional.

SEPTIMO: En atención a lo anterior solicitamos al Ministerio Público y gobierno central:

1. Que cesen las acciones de criminalización y persecución de las y los líderes en nuestras comunidades.

2. Se nos brinde información exacta sobre las diligencias investigativas realizadas por la Fiscalía de Etnias, y en general por el Ministerio Público sobre las denuncias presentadas desde nuestros territorios ante las violaciones de las que hemos sido objeto.

3. Se nos dé respuesta ante los asesinatos de nuestra compañera Tolupán Enriqueta Matute y nuestros compañeros Ricardo Soto, Armando Fúnez, Salomón Matute, Samael Matute, Milgen Soto, Erásimo Vieda y demás asesinatos sobre los cuales no existen procesos judiciales en contra de los autores intelectuales y materiales.  Exigimos justicia, memoria y verdad en el esclarecimiento de estos hechos y se garantice por el Estado de Honduras la no repetición de los mismos.

4. Exigimos a MIAMBIENTE, INHGEOMIN y demás instituciones del gobierno, así como al Ministerio Público se investigue y sancione inmediata y diligentemente las violaciones cometidas por la empresa MINOSA, subsidiaria de Aura Minerals, en el territorio maya chortí de la comunidad de Azacualpa.

Emitido en la ciudad de Tegucigalpa, Francisco Morazán, 06 de abril de 2022. 

¡Hasta la Dignidad siempre!

Por el respeto a los derechos del pueblo Tolupán seguimos en pie de lucha.

El Consejo Preventivo de la Tribu San Francisco de Locomapa (CPT), el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, el Bufete Estudios para la Dignidad y Fundambiente hemos sostenido una reunión con las nuevas autoridades de la Municipalidad de Yoro para encontrar puntos de encuentro que permitan respetar y reivindicar los derechos del pueblo Tolupán que habita el municipio de Yoro.

Entre algunos de los puntos planteados en esta reunión por parte de nuestros compañeros y compañeras del CPT están: El respeto a la sentencia del Recurso de Amparo que reconoce el derecho a la Salud y Alimentación de la Tribu San Francisco de Locomapa, la clínica médica Tolupana que debe tener nombrado un médico permanente, estar ubicada, abierta y abastecida dentro de la Tribu y poner un alto a la explotación indiscriminada de los bosques y de los bienes comunes y naturales que son los generadores de todas las muertes y violencias hacia las y los indígenas.

“Nosotros no queremos que nos regalen nada, solo que se cumpla la ley”, le dijo nuestro compañero José María Pineda coordinador del Consejo Preventivo de Tribu a la alcaldesa Martha Puentes a quien además le mencionó que estas peticiones se hacen sin comprometer los bienes de la Tribu.

Este primer encuentro finalizó con la promesa de las autoridades municipales de sostener una segunda reunión donde la corporación municipal deberá dar respuesta a las peticiones de la Tribu, cumplir con el derecho a la salud es garantizar la vida del pueblo Tolupán. 

La Clínica Médica Tolupana fue ganada mediante acción legal interpuesta ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de San Pedro Sula que ordenó a la Municipalidad de Yoro tutelar el derecho a la salud y alimentación del pueblo Tolupán, esta acción legal pasó consulta a la Sala de los Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, pero esta instancia no se ha pronunciado y su silencio pone en riesgo la vida de las y los indígenas.

Indígenas Tolupanes demandan permanencia de clínica dentro de la Tribu.

La Tribu San Francisco de Locomapa de Yoro nuevamente es sometida al despojo, la discriminación y condenada a no tener acceso a salud de calidad, la Secretaría de Salud y la negligencia de las autoridades salientes de la municipalidad de Yoro han puesto en riesgo el funcionamiento de la clínica que fue ganada mediante sentencia judicial en el año 2021.

Las y los indígenas lograron obtener este centro asistencial después de una acción legal interpuesta por organizaciones de Derechos Humanos como el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, el Bufete Estudios para la Dignidad, Fundambiente y el Consejo Preventivo de Tribu, estructura indígena de la Tribu encargada de velar por el bienestar colectivo de la comunidad.

Hoy la clínica está siendo atacada y pretende ser removida de la Tribu indígena para ubicarla en una comunidad habitada por personas ajenas a la Tribu (ladinas) sin el consentimiento de las y los indígenas que presentaron la acción legal que fue resuelta por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de San Pedro Sula que ordenó a la Municipalidad anterior que: “Defina un Plan de Acción Permanente para que todos los integrantes de la Tribu San Francisco de Locomapa sean satisfechos en su derecho a la Alimentación, debiendo integrarse como Parte de este Plan al Presidente del Consejo Preventivo de Tribu, e incorporar, en el desarrollo del mismo, los estándares internacionales sobre Derecho de las Personas y de los Pueblos Indígenas”.

Además, la resolución dicta que se “Presente un informe que describa la cantidad de familias que integran la Tribu Tolupán San Francisco de Locomapa, y el tipo y cantidad de alimentos proporcionados a cada uno”.

En la segunda cláusula de la resolución el juez ordena “Que, de manera inmediata, la Municipalidad de Yoro, Departamento de Yoro, facilite asistencia medica integral a todos los miembros de la Tribu de San Francisco de Locomapa, para atender las afectaciones biológicas-nutricionales derivadas de la violación a su derecho a la alimentación. La atención medica debe ser conforme al respeto a la diversidad cultural y especializada para la atención de la niñez, la vejez, mujeres embarazadas y cualquier grupo vulnerable frente a la pandemia COVID-19; y se deberá acreditar el tipo de asistencia Médica brindada a cada persona”.

También el juez resolvió delegar la tarea de vigilancia al cumplimiento de esta a instancias como el Ministerio Público.  “Que el Ministerio Público vigile el estricto cumplimiento de la Autoridad Recurrida a este amparo, velando por que esta asuma la Responsabilidad durante la emergencia sanitaria y que mantenga la obligación de respetar y garantizar los derechos invocados en este Amparo al Pueblo Indígena Tolupán, procediendo conforme a Derecho en caso de incumplimiento en el presente fallo.

La reubicación del doctor que atendía la Cínica Medica Tolupana se hizo sin consensuar con las y los integrantes del Consejo Preventivo de Tribu que fue una de las instancias que presentó la acción legal y que además en su resolución el juez ordenó que cualquier diligencia en relación al centro asistencial debía coordinarse con esta estructura tribal. 

La clínica funcionó desde el 30 de marzo del año 2021 hasta el mes de enero de 2022 en la comunidad de San Francisco Campo donde se atendían un promedio de 70 pacientes al día que presentaban enfermedades como la epilepsia, el asma y la hipertensión en los adultos, en niños las infecciones respiratorias agudas y diarreicas que podría generarlos el agua que ingieren, especialmente los que habitan en las comunidades más postergadas de la Tribu.

Ahora las y los indígenas deberán caminar entre seis y siete horas para llegar a la clínica a donde la Secretaría de Salud nombró el medico que antes atendía en la Tribu, creando un perjuicio de salud y económico para las y los habitantes de las comunidades tribales.

La exigencia para las nuevas autoridades municipales y del gobierno central es que la clínica siga funcionando en la Tribu y así garantizar el derecho a la salud de la población indígena de la zona de Locomapa.

Atacan y destruyen instalaciones de radio indígena en Honduras.

Como una muestra de lo que ha llevado el modelo extractivo a las comunidades en Honduras y en especial a las tribus indígenas Tolupanas del departamento de Yoro, el pasado lunes 10 de mayo de 2021 un grupo de personas afines a un empresario maderero, Wilder Dominguez, atacaron y destruyeron parte del edificio que se construye para que funcione Radio Dignidad tolupana, y además, agredieron y amenazaron a las y los indígenas que luchan por la preservación de su territorio.

Durante el ataque perpetrado contra el Campamento Digno por la Defensa del Bosque y el Territorio Tolupán, los criminales destruyeron las instalaciones de la Radio Dignidad Tolupana, medio de comunicación alternativo que funcionará en la Tribu San Francisco de Locomapa y que se ha ido construyendo gracias al aporte de hombres y mujeres indígenas que han destinado parte de su tiempo y sus recursos para impulsar y construir este proyecto.

A pesar de haber habido un buen grupo de luchadores y luchadoras sociales en el Campamento al momento del ataque, nuestros compañeros y compañeras no reaccionaron a las agresiones, esto como principio básico de que nuestra lucha es pacífica y sin violencia.

“A eso de las 7:00 de la mañana el incidente que hubo fue la represión del Consejo Directivo, en primera instancia, desbarataron el muro de la radio, hubo amenazas a morir, hubo disparos, a la compañera Rosadilia Vieda le hirieron el dedo con un machete”, dijo uno de nuestros compañeros que estaba en el lugar al momento de la agresión.

Pero el ataque no se detuvo ahí, los delincuentes avanzaron a lo interno del Campamento Digno. “Ya en el Campamento, quemaron la manta del Movimiento, le metieron fuego, dijeron que iban a meterle fuego a la casa de mi hermano”. Amenaza que se concretó a eso de las tres de la tarde cuando estaba la policía en la zona y no hizo nada por detener el crimen, contrario a eso, contribuyó a extraer los camiones cargados de madera.

Las y los indígenas han denunciado en reiteradas ocasiones las acciones de violencia que se dan cuando el empresario llega a las comunidades, pero lo más lamentable de esto es que ninguna autoridad les presta la debida atención para detener las agresiones. “Poniéndole parte a las autoridades porque esto es viejo, y uno viene pidiendo estos auxilios, y uno en verdad no es que está tunco, lo que pasa que en estos momentos queremos que las leyes se cumplan, en verdad que el que sea culpable de estos actos que paguen sus condenas”, dijo nuestro compañero Amado Cabrera.

En el hecho también resultaron heridas varias personas, integrantes del MADJ, entre las afectadas está una menor de edad que fue golpeada y herida con una piedra, también otro joven que recibió un golpe en una de sus piernas. Los incidentes no finalizaron ahí, los criminales también dispararon contra Jackelin Ávila, joven indígena quien se encuentra herida de bala y recibiendo atención medica en un centro asistencial de la zona norte. Las acciones violentas finalizaron con al menos tres individuos ingresando a la casa del luchador social, Celso Alberto Cabrera a quien le incendiaron la vivienda con varios de sus hijos menores de edad adentro, debido a la rápida intervención de vecinos y compañeros de lucha, sus hijos y esposa resultaron ilesos.

Radio Dignidad Tolupana se empezó a edificar el 19 de diciembre de 2019 en el mismo sitio donde fueron asesinados tres indígenas en el año 2013, este crimen sigue en total impunidad y esto alienta a los agresores para que sigan cometiendo estos delitos.

El trabajo y el aporte de las comunidades organizadas en el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia ha sido esencial para el avance en el proyecto de comunicación que abrirá nuevos espacios de participación por todo el pueblo Tolupán.

Barbarie y terrorismo de Estado contra el pueblo Tolupán de Locomapa: la vida digna del pueblo Tolupán no puede valer menos que una troza de madera.

La barbarie de la empresa INMARE, propiedad de Wilder Domínguez, y la complicidad corrupta de la FETRIXY y el Consejo Directivo de la tribu, nuevamente quedaron evidenciadas en San Francisco de Locomapa al perpetrarse diferentes actos de violencia que dejaron como saldo una persona herida de bala, varias personas heridas de arma blanca, una casa incendiada y el muro perimetral en construcción de Radio Dignidad Tolupana totalmente destruido.

De manera concreta, el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, MADJ, el Bufete Estudios para la Dignidad y FUNDAMBIENTE denunciamos que el pasado 10 de mayo se realizaron los siguientes actos delictivos:

  1. Alrededor de las 7:30 de la mañana, unos 60 indígenas, trabajadores de la empresa maderera INMARE, propiedad de Wilder Domínguez, en compañía de dirigentes del Consejo de Tribu se dirigieron hacia la sede del Consejo Preventivo, situado en el caserío de San Francisco Campo, y procedieron, sin ningún tipo de mediación, a destruir el cerco perimetral y la construcción que hasta ahora se ha realizado de las instalaciones de la radio comunitaria “Dignidad Tolupana”. Kristian Donely Medina, miembro del CDT, almágana en mano, inició la demolición de paredes y destrucción de implementos.
  2. A las acciones de destrucción de la infraestructura le siguió un ataque por parte de los indígenas obreros de INMARE, quienes, armados con machetes y armas de fuego, procedieron a atacar a los miembros del Consejo Preventivo y demás pobladores indígenas que se encontraban en las instalaciones del campamento.
  3. Entre las principales personas que atacaron a la población y destruyeron el inmueble se encuentran: José Alberto Vieda, Presidente del CDT, Kristian Donely Medina, Secretario del CDT, Yeri Adalid Córdova, fiscal del CDT, Melvin Antonio Cabrera, Nicolás Córdova, Jaime Matute y unos sesenta trabajadores de la empresa maderera INMARE, dedicada a arrasar los bosques de la tribu.
  4. Ante la dimensión de las agresiones, el Consejo Preventivo de la tribu, el Bufete Estudios para la Dignidad y el MADJ solicitamos la inmediata intervención del Mecanismo Nacional de Derechos Humanos y de la Policía Nacional, pero ambas instituciones guardaron un silencio tan criminal como las acciones realizadas por los trabajadores de INMARE y el Consejo Directivo.
  5. Al medio día se hizo presente la patrulla PN-952, con seis miembros policiales bajo la dirección del clase Pineda. Se creyó que la presencia de los efectivos serviría para combatir la violencia desatada por INMARE y el CDT y la detención de sus agresores, no obstante, la policía decidió utilizar su tiempo para dar paso los camiones cargados de trozas de madera explotadas de manera irregular por parte de INMARE, para lo cual contando con el acompañamiento del CDT, comenzaron a disparar contra la población para abrir el paso a los camiones.
  • En un acto de indignación, la indígena fiscal del Consejo Preventivo, Adilia Vieda, enfrentó a los camiones gritando: “Mátenme si quieren. Por defender mis derechos doy la vida”, e inmediatamente fue atacada por Kristian Medina, del CDT, con un machete y le hirió los dedos de una de sus manos. Mientras tanto, Jaime Matute continuaba disparando a la población logrando herir en una de sus piernas, a la indígena Norma Jakelin Ávila, que se encuentra hospitalizada en el Hospital Regional Mario Catarino Rivas en San Pedro Sula.

De igual manera, la menor de edad Gabriela Ávila, hija de Norma Jakelin Avila, resultó herida tras recibir una pedrada en su cabeza, igual que Joel Fúnez, que también fue alcanzado por una piedra en su cuello, y Enia Ávila, que resultó con una luxación de su pie derecho.

  • Luego del paso de los camiones cargados de madera la patrulla policial abandonó la tribu sin importarle la condición de los heridos. Para el 11 de mayo, la misma patrulla policial [PN-952] volvió a hacerse presente en San Francisco de Locomapa, con 7 policías encapuchados y cuatro militares. Llegaron para conseguir que saliera uno de los camiones madereros que se había dañado el día anterior, y abandonaron la tribu tan pronto como el camión salió de la zona.
  • Hacia las 3 de la tarde, Kristian Medina, del CDT y otros trabajadores de INMARE, ingresaron a la casa del indígena Celso Alberto Cabrera, dirigente del Consejo Preventivo y miembro del MADJ, derramaron gasolina y prendieron fuego. La esposa de Celso Cabrera y sus dos hijos, que estaban dentro de la vivienda lograron evacuar la vivienda en último momento.  La casa fue consumida en su totalidad. Adicionalmente. También provocaron destrozos en la casa de habitación de Antonia Cabrera, a quien se le destruyó una pequeña planta eléctrica que servía al Consejo Preventivo para cargar sus celulares y comunicarse entre los más de 20 caseríos de la tribu y con el exterior. Celso y Antonia son hijo e hija de la mártir Enriqueta Matute, asesinada el 25 de agosto de 2013 junto a otros dos indígenas que luchaban contra empresarios mineros y madereros que con el aval de la FETRIXY y el CDT devastaban los territorios tribales en ese momento.
  • Durante el ataque, las y los indígenas relatan que los agresores no dejaban de proferir insultos y amenazas de muerte en contra de actual presidente del Consejo Preventivo, José María Pineda, Angela Murillo, actual secretaria del CPT y en contra de todas y todos los miembros del MADJ en Locomapa. Proferían frases groseras como “aquí va a rodar sangre”, “Los que están procesados los vamos a matar para que dejen de joder”.
  • La indígena Ángela Murillo, fue amenazada directamente por Kristian Medina con que “Hoy a las 12 de la noche te vamos a ir a sacar de tu casa y te la vamos a quemar”, inmediatamente, Ángela se movilizó a los juzgados de Yoro a interponer una denuncia por daños, incendios, amenazas y lesiones. La DPI y el Ministerio Público se resistieron inicialmente a recibir la denuncia, pero, tras la presión del grupo de indígenas que acompañaba a Ángela y los reclamos del defensor de derechos humanos del MADJ que acompañaba en ese momento a los tolupanes se consiguió finalmente que la DPI tomara la denuncia.

Frente a esta descripción de hechos, para el MADJ, el Bufete Estudios para la Dignidad y     FUNDAMBIENTE queda claro que:

  1. La policía y las fuerzas armadas llegaron para garantizar que el empresario maderero Wilder Domínguez sacara sus camiones cargados de trozas de pino, en una clara y evidente alianza, que denota la corrupción existente y el “acompañamiento” que existe entre la policía, DPI, FFAA, ICF, empresariado, terratenientes, Ministerio Público y el Poder Judicial, contra indígenas organizados y en resistencia.
  2. La dinámica de los hechos expuestos demuestra que se trata de un acto de terror de Estado y del capital privado en contra del pueblo Tolupán que ha optado por resistir al saqueo de su territorio. Los empresarios de la madera y sus testaferros dentro de la tribu nuevamente quieren imponer el miedo, terror a fin de desmovilizar a la población que defiende sus bienes naturales.
  3. Señalamos a Wilder Domínguez, propietario de INMARE, como responsable principal de este nuevo hecho de violencia y la complicidad corrupta de la FETRIXY y el Consejo Directivo de la Tribu.
  4. Condenamos la complicidad del Estado de Honduras que desde sus instituciones como el ICF, Ministerio Público, Policía Nacional, INA, MIAMBIENTE y municipalidad de Yoro se preocupan más por satisfacer la avaricia del empresario Wilder Domínguez y su empresa INMARE antes que buscar una solución que devuelva la paz a una tribu que busca defender sus derechos naturales y territoriales.
  5. Urgimos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA (CIDH) a condenar estos actos en los que se pone en grave riesgo a ciudadanos y ciudadanas indígenas tolupanes beneficiarios de medidas cautelares, mismas que en reiteradas audiencias de la CIDH se han expuesto. Estas medidas, son irrespetadas por el Estado de Honduras cada vez que la empresa INMARE necesita devastar los bosques de la tribu y atentar contra la integridad física y emocional de indígenas tolupanes.

Finalmente, solicitamos, como un acto de permanente solidaridad que dignifique al pueblo Tolupán, que la sociedad hondureña, las organizaciones nacionales e internacionales defensoras de los derechos humanos, estudiantes, organizaciones feministas, ambientalistas, pueblos negros e indígenas, LGTBIQ, unidades académicas, artistas y a la comunidad internacional se pronuncien públicamente para exigir justicia para los tolupanes de San Francisco de Locomapa y para que este hecho no quede en la impunidad.

Les invitamos a pronunciarse a través de los hashtag #LocomapaResiste, #ResistenciaTolupana y #DignidadyJusticia, a través de sus perfiles en redes sociales, así como el acompañamiento a próximas acciones legales y de movilización por la justicia y la dignidad del pueblo Tolupán. 

A los terroristas del CDT al servicio de INMARE les decimos que ningún acto de barbarie similar al de los últimos días harán desistir a quienes somos parte del Movimiento Amplio de nuestra lucha, pacífica, justa y legítima en territorio Tolupán, como en el resto de territorios en el país.

San Pedro Sula. 12 de mayo de 2021