José Salomón Matute y Juan Samael Matute, dos indígenas asesinados por la defensa de su territorio, presentes en nuestras luchas.
Reunida
en el Centro de Formación Finca
Torogoses, la militancia del
Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia representada a través de los
núcleos comunitarios de Pajuiles, Planes de Arena Blanca, Toloa Adentro, Mezapa
Batán, Metalias, El Socorro, Nueva Esperanza, Camagüey, Arizona, El Retiro, Mezapita,
Azacualpa, Las Delicias y Coloradito, pertenecientes al departamento de Atlántida, las Tribus del
pueblo Tolupán de San Francisco de Locomapa, Luquigüe, Santa Martha, Mina Onda
y El Palmar con sus diferentes aldeas del departamento de Yoro, así como de San
Pedro Sula, Cortés y Copán, durante los días 05, 06 y 07 de julio del presente,
ante la comunidad organizada y no organizada nacional e internacional
declaramos y comunicamos que:
El mundo, y de nuestro interés particular Honduras,
sufre hoy los efectos de un modelo desmesurado en crisis. El capitalismo y sus
agentes (bancos, transnacionales, conglomerados mediáticos, instituciones
internacionales y gobiernos a su servicio) buscan potenciar sus beneficios a
costa de una política intervencionista y neocolonialista, a través de guerras,
ocupaciones militares, tratados de libre comercio y otras modalidades que
también se expresan en el modelo de concesionamiento y privatización de bienes
y servicios públicos, de salarios, siendo su expresión más dramática la
precarización acelerada de los derechos en general.
Las consecuencias son palpables, estamos ante un
modelo económico y la aplicación de medidas que multiplican el desempleo,
explotación desmesurada y de manera incompatible con la vida los recursos
naturales que, reprime, persigue, criminaliza y asesina con el afán de lograr
un control absoluto de los territorios.
Ante
ese escenario adverso, desde el MADJ nos revitaliza y llena de fuerza el
encontrarnos, pensarnos y comprometernos para refundar a Honduras y por
liberarla del yugo de la opresión, la corrupción, la impunidad y la violencia
que la ha asediado históricamente. Para ello, hoy más que nunca, Juan Samael y José Salomón Matute quienes representan
esta resistencia permanente, autentica, coherente nos guían, y en esta XI Asamblea
nos condujeron con su nombre, su aporte, su fuerza, su compromiso y su legado
que es nuestra responsabilidad mantenerlos vivos.
Así,
reunidas/os en asamblea permanente desde el MADJ, luchamos contra las causas de
las crisis sistémica que se expresa en lo económico, financiero, político, alimenticio,
social, ambiental y cultural, asumimos hasta las últimas consecuencias nuestro
compromiso político por una Honduras que ha decidido dar la avanzada; de la
resistencia a la soberanía con dignidad.
Para
ello y coherentemente con nuestra determinación por los procesos colectivos, la
participación activa de las y los asambleístas de las comunidades de base en
general, que brinda vida orgánica a nuestra organización y fortalece sus
estructuras, sus criterios y perspectivas, durante estos días de trabajo
ha reafirmado su razón de ser, llegando
a acuerdos políticos y organizativos, a través de la discusión, el debate y de
pensarnos desde la comunidad, desde los Campamento Dignos, desde las
resistencias y desde el país.
Ante
los hechos recientes y en curso en Honduras, desde nuestra base comunitaria
sostenemos que la dignidad del pueblo hondureño ha estado a la altura para
confrontar al régimen dictatorial del Partido Nacional, quien ha transgredido
el estado de bienestar y el estado de derecho, entregando el territorio
nacional, agrediendo el derecho y autodeterminación de los pueblos.
Por
esa razón, no solo asumimos el grito colectivo FUERA JOH, sino que también hemos
acordado acuerpar la movilización popular a nivel nacional cuyo motor sea la
soberanía y la dignidad del pueblo hondureño. Apostándole además a su
fortalecimiento desde el pensamiento y la acción colectiva con el propósito de
la dignificación de nuestra patria.
Y sobre todo, asumiéndolo desde nuestra
apuesta política y mandato comunitario de pasar de, ¡la resistencia a la
soberanía con dignidad!
Ellos y ellas son los nueve indígenas criminalizados por defender su bosque y su territorio ancestral.
Las Américas, 24 de junio de 2019.- Ante el nuevo esfuerzo por criminalizar a líderes y lideresas indígenas de la tribu tolupan de San Francisco Locomapa, organizaciones nacionales e internacionales condenamos estos hechos y denunciamos que el Estado, de manera intencional y sistemática, busca acallar a pueblos indígenas que legítimamente ejercen acciones de protesta y exigen el cumplimiento de sus derechos.
Honduras, que ha privilegiado el extractivismo como modelo económico, es uno de los países más peligrosos del mundo para la defensa de derechos humanos. El pasado 17 de mayo, autoridades del Estado de Honduras presentaron requerimientos fiscales en contra de nueve indígenas tolupanes con el fin de procesarles en razón de la “obstaculización del plan de manejo forestal”.
Esta acusación se da como represalia a su labor de defensa de la vida, el territorio y los bienes naturales de la población; práctica que ha sido sistemática en uno de los países más peligrosos para las personas defensoras.
Este lunes 24 de junio los y las lideresas se enfrentarán a la audiencia inicial en la cual se decidirá sobre la prosecución o no de la acusación. Dicha audiencia tiene lugar cuatro meses después del asesinato de dos indígenas tolupanes integrantes del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia (MADJ) y se enmarca en la grave situación de riesgo, violencia y criminalización que enfrenta la tribu desde 2010.
Como consecuencia del otorgamiento de planes de manejo forestal y operativo sin respeto al derecho a la consulta y consentimiento previo, libre e informado, los departamentos de Yoro y Francisco Morazán, territorios del pueblo indígena tolupán, han sido blanco de explotación por parte de empresas y personas ajenas a la comunidad.
En virtud a esta situación, sumada a la pérdida del territorio y el desplazamiento forzado, se organizó el Consejo Preventivo de la Tribu, el cual, integrado por decenas de integrantes del pueblo indígena, ha desarrollado acciones de defensa y protesta pacífica. Esta reivindicación ha conllevado un incremento del riesgo y múltiples amenazas que se han materializado en criminalización y asesinatos.
Así, en 2010 se criminalizó a 8 indígenas tolupanes por el mismo tipo penal que el referido en la actualidad –obstaculización del plan de manejo–, repitiéndose de nuevo en 2012 mediante la criminalización de tres líderes indígenas; en ambos casos, por acción de sus abogados defensores, las personas criminalizadas resultaron absueltas de los cargos.
Posteriormente, en 2013, se asesinó a los líderes Ricardo Soto y Armando Fúnez, así como a la lideresa María Enriqueta Matute. En razón de estos graves hechos, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), otorgó las medidas cautelares MC 416-13 a 35 miembros de la comunidad a partir de 2013 y ordenó al Estado a proteger su vida e integridad.
A pesar de ello, en 2015 asesinaron a dos beneficiarios de las medidas, Erasimo Vieda y Luis Marcía; en 2016 también se asesinó al beneficiario Santos Matute. En lo más reciente, en febrero de este año, Juan Samael y el beneficiario José Salomón Matute, fueron asesinados por dos individuos que anteriormente les habían amenazado.
Respecto de estos últimos asesinatos, la CIDH recordó que “los pueblos indígenas tienen derecho a gozar del control efectivo de sus tierras y a verse libres de interferencia de personas que pretenden tomar control de sus territorios mediante el uso de la violencia. Los Estados también se encuentran obligados a prevenir y luego proteger a los pueblos indígenas afectados de estos actos violentos cuando ocurren en el marco de conflictos territoriales”.
Recordamos también que este órgano ha indicado: “Que haya una medida cautelar vigente de la CIDH quiere decir que las autoridades estatales estaban informadas de la situación de riesgo grave inminente en que estaba la persona, por lo cual resulta particularmente preocupante que no se hayan adoptado las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las personas protegidas por la misma”.
Asimismo, y como han indicado la CIDH y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), las organizaciones firmantes denunciamos el impacto que tiene el uso malicioso el derecho penal para limitar el ejercicio de defensa de derechos humanos, en particular la defensa del derecho a la tierra y el medio ambiente por parte de personas campesinas y líderes y lideresas sociales. Notamos con preocupación que, esta misma semana, cinco líderes y lideresas del departamento de Arizona también enfrentan un juicio relacionado con su resistencia pacífica a una hidroeléctrica en la zona.
En consideración de lo anterior, exigimos que se reconozca la inocencia de las 9 personas criminalizadas a través del sobreseimiento definitivo. Asimismo, solicitamos a las autoridades que cese la violencia, discriminación y criminalización en contra de la tribu tolupán de San Francisco Locomapa y que se garanticen sus derechos sobre su territorio, se proteja su vida y se sancione a quienes han violentado sistemáticamente sus derechos humanos.
Por último, nos solidarizamos con la legítima y digna defensa ejercida por las y los tolupanes y hacemos un llamado a la comunidad nacional e internacional a seguir de cerca su audiencia, que está programada para el día de hoy 24 de junio de 2019 y exigir justicia.
Organizaciones firmantes:
Alemania Colectivo Cadeho Oekumenisches Netz Rhein-Mosel-Saar
Bélgica Red Europea de Comités Oscar Romero
Canadá Comité por los Derechos Humanos en América Latina Guatemala Community Network Todos por Guatemala United for Mining Justice
Colombia Movimiento Nacional de Víctimas de Corporaciones Multinacionales
Ecuador Centro de Documentación en Derechos Humanos «Segundo Montes Mozo S.J.» (CSMM)
Estados Unidos Alliance for Global Justice Central American Resource Center (CARECEN) — DC Franciscan Action Network Guatemala Human Rights Commission (GHRC) Hands Off Honduras – Minnesota Interfaith movement for human integrity Nicaragua Center for Community Action Parlamento Maya USA School of the Americas Watch (SOAW) Oakland/East Bay SOA Watch Witness for Peace Solidarity Collective
El Salvador Asambleas Comunitarias de El Salvador Instituto de Derechos Humanos de la UCA (IDHUCA) Universidad Centroamericana José Simeón Cañas
España Anticapitalistas Madrid. Área Internacional Comunidad Centroamérica en España Plataforma por Honduras en Madrid Red de Hondureñas Migradas (REDHMI)
Guatemala Asociación Bufete Jurídico De Derechos Humanos Asociación para la Promoción y el Desarrollo de la Comunidad CEIBA Bufete para Pueblos Indígenas Centro Para la Acción Legal en Derechos Humanos Comité Campesino del Altiplano (CCDA) Comité de Desarrollo Campesino (CODECA) Comité de Unidad Campesina (CUC) Familiares y amigos contra la Delincuencia y el Secuestro Festivales Solidarios H.I.J.O.S. Guatemala Instituto Amaq’ Prensa Comunitaria Red Tz’ikin – Realizadoras-es Independientes de Guatemala Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos -Guatemala (UDEFEGUA) Unión Nacional de Mujeres Guatemaltecas (UNAMG)
Honduras APAF-INFOP Asociación LGBT Arcoiris de Honduras ASONOG BAMBÚ Bloque Popular Centro de Derechos de Mujeres (CDM) Centro de Desarrollo Humano (CDH) Centro de Estudio para la Democracia (CESPAD) Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de la Tortura (CPTRT) Colectivo de Trabajadoras y Trabajadores Sociales de Honduras (CTSH) Comité para la Defensa del Consumidor Hondureño Comité por la Libre Expresión (C-Libre) Conexihon Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) Coordinadora de Organizaciones Populares del Agua (COPA) Ecuménicas por el Derecho a Decidir Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación de la Compañía de Jesús en Honduras (ERIC-SJ) Fundación San Alonso Rodríguez (FSAR) Justicia Paz e Integridad de la Creación – Familia Franciscana Honduras Juventud del Milenio La Insurrecta Movimiento Ambientalistas Santabarbarense (MAS) Movimiento de Diversidad en Resistencia (MDR) Plataforma Agraria Regional del Valle del Aguan Puras Mujeres Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras (RNDDH) Red Nacional de Jóvenes Artesanos de la Paz Somos Muchas Terco Producciones Unión Estudiantil Morazanista (UEM)
Italia Collettivo Italia Centro America, CICA
México Procesos Integrales para la Autogestión de los Pueblos Red Mexicana de Afectadas/os por la Minería (REMA) Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho (FJEDD)
Noruega Comité Noruego de Solidaridad con America Latina (LAG)
Venezuela Coalición de Tendencias Clasistas (CTC-VZLA)
Regional Brigada José Artigas de Trabajo Voluntario Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) Comisión Internacional de Juristas (CIJ) Cruz Morada Hondureña Fads Hablemos de Derechos Humanos Honduras Solidarity Network in North America Informations Gruppe Lateinamerika (IGLA) Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos JOPRODEH La Cadejos, Comunicación Feminista La Voz de los de Abajo, Chicago Movimiento Mesoamericano contra el Modelo Extractivo Minero – M4- Oficina Ecuménica por la Paz y la Justicia Protection International Mesoamérica Task Force on the Americas The St. Louis Inter-Faith Committee on Latin America (IFCLA)Internacional CIVICUS: Alianza Global de la Sociedad Civil Confederación General del Trabajo Due Process of Law Foundation (DPLF) Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) en el marco del Observatorio para la Protección de Defensores de Derechos HumanosForo Honduras Suiza JASS (Just Associates) Migrant Roots Media Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT) en el marco del Observatorio para la Protección de Defensores de Derechos Humanos Plataforma Internacional Contra la Impunidad (PI) Trocaire
Compañeros y compañeras de Guapinol durante la audiencia inicial en Tegucigalpa, Honduras. Foto: Redes sociales.
El
Estado de Honduras criminaliza las legítimas luchas de las comunidades en
defensa del agua para la vida, por lo que desde el Movimiento Amplio condenamos
la injusta y criminal privación de libertad de once defensores y una defensora
de los derechos humanos del sector de Guapinol, Tocoa, por mandato expreso de
los operadores de justicia del Ministerio Público y juzgados involucrados en la
criminalización de los líderes del Aguán. Desenmascaramos la actitud cómplice
de los operadores de justicia por la cual caen de rodillas ante los empresarios
saqueadores de los bienes naturales de los pueblos y sólo se ponen de pie para
denegar justicia al pueblo, torcerla a favor de la oligarquía extractivista y
castigar a los humildes que se atreven a defender la vida.
Como
si no fuera más que suficiente el asesinato de alrededor de dos centenas de
campesinos en la zona del Aguán a los cuales el Estado de Honduras no ha hecho
justicia, la crisis causada por la devastación que está provocando la empresa
minera Los Pinares en los sectores de Guapinol y Ceibita ya ha producido 3
asesinatos, 20 personas desplazadas (algunas con sus familias) y 18 líderes y
lideresas criminalizadas. Se acusa de asociación ilegal a quienes se organizan
para defender junto con sus comunidades el derecho humano de acceso al agua,
decretado por la ONU mediante Resolución 64/292, el 28 de julio de 2010.
Resulta
inadmisible que los operadores de justicia criminalicen de una sola vez a los
líderes y lideresas de las comunidades del sector de Guapinol en vez de
solventar la presente crisis, que ya la Ley General de Aguas asume como
situación normal -a la cual hay que adelantarse-que de suyo se presenta en
torno a la gestión de los recursos hídricos. El segundo considerando de la Ley
General de Aguas reconoce que “la gestión del agua tiene una profunda
influencia en la gobernabilidad y convivencia humana” y, además, “puede estar
asociada a crisis internas”, que los funcionarios deben saber manejar, en todo
caso gestionar la resolución de conflictos hídricos, aplicando el principio de
subsidiariedad.
La
decisión de enjuiciar a las líderes y lideresas de las comunidades de Guapinol
por supuestos delitos de asociación ilícita resulta tan descabellada como
injusta. Organizarse para la gestión hídrica de las comunidades no es ni nunca
será un delito sino un derecho inalienable que se debe defender aun con la vida
misma si es necesario. La ya citada Ley General de Aguas convoca a los
ciudadanos y ciudadanas a organizarse para la gestión de los recursos hídricos,
reconociendo en este recurso natural un bien social cuya prioridad esencial
consiste en la satisfacción del consumo humano y su saneamiento; los demás usos
vendrán por añadidura si los caudales lo permiten. El Artículo 3 considera como
principios fundamentales de la gestión hídrica: 1) la protección y conservación del
agua como acción prioritaria del Estado, pero como el Estado no lo
hace, entonces lo tiene que hacer el pueblo de Tocoa; 2) “El consumo humano tiene relación
preferencial y privilegiada sobre los demás usos, que es justamente lo
que reclaman nuestros compañeros y compañera de Guapinol ahora criminalizados;
3) el
agua es un recursos social y su acceso debe ser equitativo, por lo que
no es posible que el Estado inclusive se haya prestado para reducir la zona
Núcleo del Área Protegida con tal de satisfacer los intereses de las empresa
minera Los Pinares y ahora permite la contaminación de las aguas corrientes de
la zona; 4) la participación ciudadana debe hacerse efectiva en todas las etapas o
momentos de la gestión hídrica, pero mientras la ley llama a la organización
para la participación ciudadana los operadores de justicia más bien califican
de asociación ilícita la organización de las comunidades que defienden sus
bienes hídricos; y 5) ”La gestión integral del recurso agua se hará
con la participación y responsabilidad de todas las instancias”, sin embargo,
las autoridades municipales y gubernamentales quieren decidir el destino de las
aguas de Tocoa al tenor de las demandas de las empresas saqueadoras de bienes
naturales, sin contar con las comunidades y sus organizaciones locales. Le
recordamos al Estado de Honduras que si las autoridades están actuando en
sentido contrario a lo que manifiestan las leyes, entonces nuestros compañeros
y compañera de Guapinol son objeto de denegación de justicia.
¿Basta
ya!
¡Alto
a la impunidad de los operadores de justicia y los cuerpos represivos del
Estado!, que han olvidado que por sobre la obediencia absoluta de quienes
puedan sentirse subalternos por diferentes intereses está el deber de cumplir
las leyes que emanan de la Constitución de la república.
El
Movimiento Amplio exige al Estado hondureño cumplir con la responsabilidad de prevenir las violaciones a los derechos
humanos y le recuerda que el Derecho Internacional afirma que “El acceso a agua
potable es una condición previa fundamental para el goce de varios otros
derechos humanos” (OACNUDH, 2011).
Luchadora social de Guapinol, Honduras, criminalizada por defender el agua de su comunidad. Foto: Redes sociales
Desde el Movimiento
Amplio demandamos al Estado de Honduras el cumplimiento del Principio de No
Discriminación al derecho al Agua. Le corresponde al Estado aplicar este principio
y hacerlo realidad en las comunidades de Guapinol, a quienes se les niega de
forma permanente el derecho a decidir colectivamente sobre la gestión de sus
bienes hídricos por la única razón de ser pobres y carecer del poder económico
que ostenta la empresa Los Pinares, violentando el Artículo 2, párrafo segundo
del Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales. El
Estado tiene el deber de proteger a las personas y comunidades sometidas a
vulneraciones provenientes de la empresa Los Pinares y, en vez de estar
criminalizando a quienes defienden la vida, debe establecer las medidas y
políticas pertinentes de prevención y protección para que la empresa minera no
violente los derechos humanos de los particulares.
Le advertimos a los
operadores de justicia que ahora criminalizan los líderes y lideresas de
Guapinol que si el Estado no observa cabalmente sus procederes legales en
materia de derechos humanos, medio ambiente y gestión hídrica, le será
atribuible la responsabilidad internacional por dichas violaciones, para lo
cual remitimos a la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
sobre el Caso Gonzales Lluy y otros Vs. Ecuador. Sentencia de 01 de septiembre
de 2015. Serie C No. 298, Párrafo 170.
Demandamos también la correcta aplicación del
Principio de Precautoriedad Ambiental. Es urgente que el Estado de Honduras corrija
su miopía política que sólo le permite juzgar la realidad desde los intereses
de los accionistas de la empresa Los Pinares y comience a interpretar las
correctas y justas acciones de los líderes criminalizados de Guapinol desde el
universal Principio de Precautoriedad Ambiental, consagrado como principio
de derecho internacional en el artículo 15 de la Declaración de Río sobre el
medio ambiente, de 1992, de la cual Honduras es parte: “Con el fin de proteger el medio ambiente, los
Estados deberán aplicar ampliamente el criterio de precaución (…). Cuando haya
peligro de daño grave e irreversible, la falta de certeza científica absoluta
no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces
en función de los costos para impedir la degradación del medio ambiente”.
Y le recordamos a los operadores de justicia
que han criminalizado injustamente y sin ninguna razón a los compañeros de
Guapinol que el Principio de Precautoriedad Ambiental ya fue incorporado al
derecho positivo de Honduras, estableciendo el Artículo 3 de la Ley del
Reglamento del SINEIA que, ante la existencia de amenaza de un daño al medio
ambiente o a la salud humana, se tomen medidas preventivas antes de continuar
con la actividad sospechosa, aun en ausencia de certeza científica. Es decir,
se debe detener la actividad que produce el potencial daño al medio ambiente o
a las vidas humanas hasta que se recobre la certeza científica de la ausencia
de riesgo y se tomen las medidas preventivas pertinentes.
Las
comunidades del sector de Guapinol han alertado insistentemente sobre los
cuadros de daños ambientales y humanos provocados por la explotación minera y
se han hecho proyecciones muy bien fundadas sobre la magnitud de los peligros
potenciales de continuar con la explotación minera, sobre todo en la devastación
de los bienes hídricos del municipio de Tocoa. Pero el Estado de Honduras ha
permanecido sordo a las denuncias y clamores de los pueblos de Tocoa,
violentando de esta manera la aplicación correcta de las leyes ambientales. No
es justo, pues, que se castigue con prisión a quienes defienden la vida.
Es importante que el
Ministerio Público realice investigaciones diligentes y apegadas a la verdad y
a la justicia antes de ponerse a criminalizar a las personas pobres de las
comunidades que defienden los bienes naturales del sector de Guapinol. No
hacerlo en escenarios como el creado por la concesión minera otorgada a la
empresa Los Pinares, no solamente los responsables del delito no responden por
sus actos, sino que también se envía un mensaje de impunidad al resto de los
empresarios oligarcas y transnacionales extractivas. El Estado de Honduras debe
demostrar que defiende justamente a la población hondureña y limpiar su imagen,
expuesta hasta ahora como un socio más de las empresas violadoras de los derechos
humanos, permitiendo su impunidad.
Desde
el Movimiento Amplio llamamos a todas las comunidades de Honduras y de manera
especial a los más de 25 sectores y comunidades que a nivel nacional estamos en
actitud de resistencia social defendiendo la soberanía ambiental de nuestros
pueblos a declararnos en Alerta Permanente y Solidaria dando
seguimiento a los acontecimientos que se suceden con los compañeros y
compañeras de Guapinol. No podemos permitir que en una actitud descarada y en
flagrante violación a los derechos de las personas y los pueblos emerja desde
el funcionariado cortesano de la narcodictadura la prohibición y el castigo
consecuente a quienes se atrevan a defender la vida con todas sus
implicaciones. En Guapinol se juega la libertad y la vida del pueblo hondureño.
Solidaridad permanente con Guapinol.
¡De
las resistencias comunitarias a la reconstrucción de la soberanía nacional!
Desde
las comunidades en resistencia,
26
de febrero de 2019.
MOVIMIENTO AMPLIO POR
LA DIGNIDAD Y LA JUSTICIA
Movimiento Amplio
Somos un movimiento social y político comprometido en la lucha por construir y desarrollar, en Honduras, una propuesta popular en contra de la corrupción y el mal manejo de los bienes públicos y a favor de una sociedad que crezca desde la transparencia, la dignidad y el respeto a los derechos humanos y al ambiente.