Este día en los juzgados de El Progreso, en el departamento de Yoro se ha leído la resolución que declara la ABSOLUCIÓN de Gustavo Cáceres, preso político de la narcodictadura en Honduras, acusado de delitos que nunca cometió y por los cuales guardó prisión durante 19 meses después de ser detenido durante las manifestaciones contra el fraude electoral en Honduras en noviembre de 2017.
Gustavo Cáceres es un joven con una discapacidad mental, fue acusado por la policía de portación ilegal de explosivos y/o material de guerra, aunque su abogado en reiteradas ocasiones ha manifestado que “la ley regula el uso de fabricación, venta, exportación e importación de explosivos, no regula la portación de dos botellas de cerveza con gasolina en su interior”.
Al ser consultado sobre el significado de lograr desvanecer los argumentos que había planteado la fiscalía y los elementos policiales que actuaron como testigos en el juicio oral y público, el abogado respondió, “esto representa parte de la arbitrariedad con la que actúa el ministerio público y el uso abusivo que hacen del derecho penal”, esto en alusión a las pruebas presentadas durante el proceso.
Cáceres fue detenido cuando trabajaba el 21 de diciembre de 2017. Es parte de los 22 presos políticos que mantuvo la narcodictadura de Juan Orlando Hernández. El único que fue sometido a juicio oral y público, puesto que el resto están en libertad condicional y cumpliendo medidas sustitutivas a la prisión.
Denunciamos el actuar de las instituciones impartidoras de justicia quienes fabrican pruebas para inculpar a gente inocente, para que nunca más un inocente sea enviado a prisión y mucho menos una persona que lucha por los derechos de los demás.
Desde el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia celebramos esta importante victoria ciudadana y nos unimos a la felicidad de la familia de Gustavo Cáceres.