A ocho años del asesinato de Enriqueta, Armado y Ricardo; Aquí nadie se rinde.

El 25 de agosto del año 2013, los y las indígenas Tolupanes, María Enriqueta Matute, Ricardo Soto Fúnez y Armando Fúnez Medina fueron asesinados en la comunidad de San Francisco Campo, perteneciente a la tribu indígena Tolupana de San Francisco de Locomapa en el departamento de Yoro.

María, Ricardo y Armando, militantes y dirigentes del MADJ en territorio Tolupan, en conjunto con el Consejo Preventivo de Tribu, tras de 12 días de resistencia para la protección de sus recursos naturales, oponiéndose a la tala ilegal de madera, así como, la explotación ilegal de antimonio en las comunidades Tolupanas de Lagunita, Bambú, Las Minas, Las Brisas y El portillo, procurando la conservación de los bienes, recursos e intereses de las y los indígenas Tolupanes, quienes conservan su título ancestral emitido en 1864 por el Estado de Honduras.

Cabe resaltar que la Constitución de Honduras, tiene una sola mención sobre derechos que corresponden a los pueblos indígenas, en su artículo 346, que establece el deber del Estado de “dictar medidas de protección de los derechos e intereses de las comunidades indígenas existentes en el país, especialmente de las tierras y bosques donde estuvieren asentadas”.

Seis años tardó el Ministerio Público en condenar a uno de los ejecutores de los asesinatos, Carlos Roberto Luque (asesinado en San Francisco de Locomapa en el año 2018). Dando el Poder Judicial una muestra más de impunidad para el pueblo Tolupan al absolver al otro asesino, Selin Eleazar Fúnez por el asesinato de nuestros compañeros. Cabe destacar que, en esos 6 años de impunidad garantizada por el Estado de Honduras, no se abrieron líneas de investigación ni acciones encaminadas en la búsqueda de las autorías que ordenaron el asesinato.

A pesar de los múltiples intentos de los empresarios, funcionarios públicos vinculados a la criminalidad y la corrupción, instituciones públicas y el Estado en detener la justa lucha por la defensa del pueblo Tolupan, han sido ocho años de permanente resistencia, denuncia y construcción de alternativas por la dignificación, la justicia y la mejoría en la calidad de vida del Pueblo Tolupan.

En esta octava conmemoración del asesinato de nuestras y nuestros compañeros, elevamos y rescatamos su memoria en nuestra identidad orgánica desde el MADJ, como punta angular en el valor de la resistencia y en la búsqueda implacable de la justicia en medio de un sistema judicial enraizado en el crimen organizado, la corrupción y la sistemática impunidad, en beneficio de unos pocos y cuyos beneficios financieros y de influencia en el poder, condenan al empobrecimiento, a la desigualdad profunda y a estadios de violencia a las población Tolupana.

Es de recordarles a aquellas y aquellos que operativizan al modelo extractivo, al crimen organizado, a las y los funcionarios públicos, empresarios y aquellos indígenas que decidieron tomar el lugar del opresor, que aquí estamos y aquí seguiremos, construyendo verdadera participación, dignidad y justicia para que nuestro pueblo indígena Tolupan logre las mejores condiciones de vida, a la justicia y a una distribución integral y equitativa de la riqueza que conforma su territorio.

No permitiremos, por la memoria de María Enriqueta, Armando y Ricardo, así como los otros compañero y compañeras asesinadas por luchar en contra del saqueo de nuestra bienes naturales que se concentra la riqueza en unas pocas manos, por el contrario, trabajaremos y construiremos verdadera participación, inclusión y acceso a condiciones reales y fundamentales de dignidad, libertad, justicia y poder para las y los herederos ancestrales de la tierra, sus recursos y la administración de los mismos.

Porque la tierra es de quien la trabaja,
Porque el derecho es de quien lo exige,
Y porque la memoria es de quien no la olvida,

 María Enriqueta Matute, ¡Vive!
Ricardo Soto Fúnez, ¡Vive!
Armando Fúnez Media, ¡Vive!

¡Hasta la Dignidad Siempre!

Justicia hondureña absuelve a autor material de triple crimen tolupán

El 3 de marzo de 2020, el Tribunal de Sentencia de la ciudad de Yoro, en el departamento de Yoro, dictó fallo absolutorio en favor de Selin Eleazar Fúnez, señalado como autor material del triple asesinato en contra de los indígenas tolupanes María Enriqueta Matute, Ricardo Soto Fúnez y Armando Fúnez Medina. Hechos ocurridos el 25 de agosto de 2013 en San Francisco Campo, perteneciente a San Francisco Locomapa, Yoro.

El Tribunal absolvió de toda responsabilidad penal al imputado también conocido como Selvin Matute por los habitantes de San Francisco Campo. Manifestó tener duda razonable de la participación del señor Selin Eleazar Fúnez, a pesar de que los testigos protegidos lo reconocieron completamente como partícipe y coautor del hecho junto a Carlos Luque Varela, quien fue condenado en un proceso abreviado en el 12 de febrero de 2018 luego de aceptar su responsabilidad en los tres crímenes y de haber mencionado en reiteradas ocasiones en sus declaraciones que realizó los hechos junto a Selin Fúnez.

En el desarrollo del proceso distintos documentos aportados como prueba fueron contundentes en señalar la participación del imputado y de establecer la relación que existe entre su nombre y el seudónimo “Selvin Matute” asegurando que se trataba de la misma persona.  A pesar de todo lo dilucidado en el juicio el tribunal decidió absolverlo y dejar en impunidad los crímenes sufridos por los 3 tolupanes integrantes del MADJ y sus familiares.

De acuerdo a Ariel Madrid, quien junto a la abogada Heidy Alachán fungieron como equipo de acusación privada en el juicio, y quienes forman parte del equipo legal del MADJ, el proceso continúa abierto debido a que interpondrán recurso de casación ya que en el juicio se logró comprobar mediante pruebas testificales y científicas que el acusado participó junto a otra persona en el crimen.

“Nosotros consideramos que ha habido un mal criterio, una mala aplicación del juzgado al valorar los medios de prueba y al arribar a esta conclusión, porque no corresponde con lo evacuado y con lo probado en el proceso judicial, con lo cual se estableció plenamente con prueba testifical, con prueba científica pericial que ocurrieron las muertes de los ciudadanos indígenas y que indiscutiblemente quienes participaron en la ejecución del asesinato de estos tres líderes tolupanes fue Selin Eleazar Fúnez Bonilla y una segunda persona de nombre Carlos Luque Varela”. Manifestó el abogado Madrid.

Por su parte, la abogada Alachán manifiesta que “es indispensable evaluar este fallo en el marco del papel que el sistema de justicia tiene en el contexto de violencia sistemática en contra de los pueblos indígenas y del modelo de saqueo en general en el país en el cual se inscriben estos crímenes. Ya que como se estableció en el juicio, estos crímenes responden a un problema estructural provocado por el modelo extractivo y su avance significativo como parte del modelo económico mismo del país y la violencia extrema que impacta el tejido comunitario de los pueblos y comunidades derivado de la intromisión de empresas y empresarios en sus formas de vida pacífica. Por supuesto, es imposible dejar de ver el papel que el racismo juega en la concepción de justicia occidental y discriminatoria desde la cual está configurado el poder judicial hondureño.”

La abogada Alachán también afirmó que este fallo es alarmante ya que se trata del primer juicio por 3 de los 10 asesinatos de indígenas tolupanes, integrantes del MADJ, líderes sociales de sus tribus que han ocurrido en el pueblo tolupán a partir del 2013 y por estos asesinatos, la CIDH otorgó medidas cautelares integrantes del MADJ del pueblo tolupán.

Esta cifra altamente preocupante que inició con el triple asesinato del cual participó Selin Eleazar quien ahora ha sido absuelto por la justicia hondureña. Alachán afirma que es grave el mensaje de impunidad garantizada que este precedente establece para el juzgamiento de los otros 7 crímenes y de los ataques y crímenes en contra de liderazgos sociales en el país en el general.

En Honduras es difícil encontrar justicia para los pueblos originarios desde la óptica de quienes luchan en favor de los pueblos indígenas. “Entendemos que ejercer el litigio en procesos de este tipo implican poner en la discusión obligada a tribunal y las demás partes de los derechos de pueblos indígenas, insistir en que implican derecho a la verdad. Que implica incluso defenderlo ante tribunales, juzgados y operadores de justicia, que tienen una tendencia a la discriminación, al racismo, que todavía tiene vestigios de los que fue en la norma un proceso penal inquisitivo y que materialmente se manifiesta en este tipo de casos, en la negación de justicia y verdad para todo un pueblo Tolupán, para toda una etnia, y finalmente para la sociedad hondureña en general, que lamenta una resolución de este tipo, que es en sí mismo la denegación de justicia y que se da incluso en el marco de los cuatro años del vil asesinato de la compañera Berta Cáceres”.

La lectura de sentencia está programada para el próximo 10 de marzo a las 3:00PM en los juzgados de Yoro. Desde el MADJ hacemos un llamado a las organizaciones nacionales e internacionales, a la población hondureña en general a estar expectante, solidaria y vigilante del acontecer en el pueblo tolupán, para recordarle a la justicia hondureña, a las empresas madereras, mineras y demás formas de saqueo que sufre la población tolupana que sin importar el comportamiento cómplice e injusto de la institucionalidad, somos muchos y muchas los que seguiremos exigiendo y trabajando por justicia y dignidad para el pueblo tolupán.

A juicio autor material del triple asesinato tolupán

Ramón Matute, indígena tolupán, integrante de la Conducción Política del MADJ exigiendo justicia por los asesinatos contra su pueblo, entre ellos el de su padre y su hermano.

Este 2 y 3 de marzo en los juzgados de Yoro se llevará a cabo la continuación del juicio en contra de Selin Eleazar Fúnez, uno de los dos acusados como supuestos responsables del triple crimen de indígenas tolupanes de la tribu San francisco Locomapa, el 25 de agosto de 2013.

Las víctimas de este crimen son María Enriqueta Matute, Ricardo Soto Fúnez y Armando Fúnez Medina, integrantes del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, quienes fueron ultimados en medio de la protesta pacífica que realizaban exigiendo un alto al saqueo de los bienes comunes y naturales de su tribu, el respeto del título ancestral y demandando la consulta previa, libre e informada, exactamente en el mismo lugar donde actualmente se encuentra el Campamento Digno en Defensa del Territorio y el Bosque Tolupán.

Los asesinos Carlos Varela Luque y Selin Eleazar Fúnez llegaron hasta ese lugar, donde se encontraba la vivienda de María Enriqueta, lugar que funcionaba como centro de reuniones para planificar la defensa del territorio Tolupán, y luego de preguntar por “los cabecillas” y decir que si no estaban igual matarían a “un par de indios” le quitaron la vida a Armando, Ricardo y Enriqueta quien se encontraba en la cocina.

Varela Luque fue detenido por la Policía y enjuiciado en el año 2017, fue condenado a 45 años de cárcel por este crimen, logró escaparse del presidio de Yoro y posteriormente fue asesinado en circunstancias desconocidas.

Después de este crimen ha habido 7 asesinatos de indígenas luchadores sociales, integrantes del Movimiento Amplio y beneficiarios de medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos CIDH en esta tribu, otorgadas a raíz del triple crimen y la grave situación de violencia e inseguridad que provocó en la tribu.

Este lunes y martes, el Tribunal deberá decidir sobre la participación de Selin Eleazar Fúnez en los hechos, mediante la continuación del juicio oral y público. Este es un caso emblemático para los pueblos originarios de Honduras, especialmente para el pueblo Tolupán ya que podría marcar el modelo de castigo o impunidad que el Estado de Honduras adoptará para quienes cometieron los otros asesinatos registrados a partir de 2013 y los cometidos en contra luchadores sociales del país en general.