LA JUSTICIA REAL LA SEGUIREMOS HACIENDO LOS PUEBLOS
Estimados compañeros y compañeras,
Transcurrieron ya siete años del asesinato de Bertita, y su ausencia cada vez nos pesa más. Ella con su genuina claridad política y social seguiría siendo un faro de luz y una impulsadora tenaz ante esta imperiosa necesidad de cambios reales que tiene nuestra Honduras para que sea más justa y menos impune.
El MADJ y el BED, como amigos, compañeros de lucha y representantes legales de la Causa de Berta Cáceres, sabemos que si algo ha quedado claro en todos estos años es que la labor de Bertita no se limitó a la defensa de derechos naturales o territoriales, a la protección de los derechos de los pueblos originarios, especialmente el que marcó su origen Lenca… lo que Berta nos mostró con su vida y con su muerte es cómo debe defenderse un pueblo de los intereses formales y fácticos que buscan apropiarse de lo que legítimamente nos pertenece a todos y todas.
Sabemos que en estos siete años hemos avanzado de juicio en juicio, presentando infinidad de peticiones, acusando y obteniendo fallos importantes en contra de los autores materiales directos e intermedios que ejecutaron el crimen contra Berta pero esas sentencias aún no están firmes , igual nos sigue faltando el enjuiciamiento de los autores intelectuales que decidieron su muerte y de un Estado, un gobierno y unos funcionarios/as que permitieron, avalaron y se beneficiaron con el establecimiento de un proyecto hidroeléctrico como el de Agua Zarca. También falta deducir responsabilidades a una banca nacional, regional e internacional, que, sabiendo de las violaciones a derechos humanos, financió el proyecto y por lo tanto también participó en el asesinato de Berta.
Frente a estos hechos, el MADJ y el BED, reiteramos lo siguiente:
- Que mantenemos y reiteramos nuestro compromiso humano y profesional en la búsqueda de Justicia para Berta, desde todos los espacios y en todas las instancias. Entendemos el privilegio y la responsabilidad de ser representantes legales en esta causa, por lo cual renovamos este encargo, mismo que durará hasta que nuestras representadas así lo requieran.
- Que la idea de Justicia para Berta no se limita a enjuiciar a los responsables materiales e intelectuales de su crimen, la justicia que seguimos buscando para Berta es frente a la causa que ella encarnaba, frente al modelo extractivo explotador, frente al concesionamiento del territorio y de los bienes que nos pertenecen a todos/as, contra la discriminación y frente a todo lo que afecta al pueblo hondureño y en particular al pueblo Lenca.
- Que la búsqueda de Justicia para Berta también lo haremos a partir de la lucha en contra de un modelo de desarrollo que no se corresponde con el que necesita y requiere el pueblo hondureño y la humanidad. Siempre estaremos en contra de un modelo de acumulación de capital basado en el despojo de los bienes comunes y en la explotación destructora de la naturaleza y los seres humanos.
Resta mucho camino que recorrer para lograr plenamente esos objetivos, sobre todo porque esta dirigencia política – económica rancia no quiere entender que Honduras no les pertenece y es así, que recurrentemente tenemos nuevos asesinatos de dirigentes sociales y los retos de volver eficaz el acceso a la justicia, cada vez es más “negociada”.
Sin embargo, también entendemos que a pesar de que estos hechos se repitan, cada vez existe menos disposición de las comunidades y de sus liderazgos, en quedarse callados ante el abuso directo de los empresarios y de las conexiones de poder que hay entre estas élites y los funcionarios de gobierno. Estas redes de corrupción perduran, pero es más fuerte el rechazo y el hartazgo social.
Es decir que sabemos que los criminales que Berta combatió siguen vigentes, pero su asesinato multiplicó y profundizó la lucha de centenares de comunidades, de decenas de organizaciones y de miles y miles de lideres y lideresas a lo largo y ancho del país que no renunciamos, ni renunciaremos jamás a defender nuestros derechos y los de una Honduras Digna para todos y todas.
Compañeros y Compañeras del COPINH y del Movimiento Social Hondureño: Berta Cáceres, ustedes y nosotros siempre hemos tenida clara la magnitud del hermoso proyecto popular que encarnamos y tenemos sobrado conocimiento del desafío que implicó e implica siempre enfrentar a la mafia económica y política que atropella nuestra dignidad como pueblo. Tanto conocemos a los enemigos del pueblo, que Berta los derrotó en Río Blanco y en muchos territorios del pueblo lenca; igual lo ha hecho el movimiento estudiantil, las compañeras mujeres organizadas y muchas comunidades y organizaciones que, a lo largo y ancho del país, de hecho, han liberado y recuperado sus territorios de los capos de la economía y la política respaldados por las fuerzas mercenarias de la policía, de la fiscalía, del poder judicial y el ejército hondureño.
Berta nos reiteró siempre que la dignidad es el camino, nunca esperó y nosotros tampoco debemos esperar ser gobierno para avanzar en la consolidación del proyecto popular. Tampoco debemos esperar que, solícitamente, un gobierno cruzado por todos intereses y tentáculos de los grupos económicos corruptos y violentos nos resolverá nuestra histórica demanda de justicia y dignidad para todos y todas.
En este séptimo aniversario del cobarde crimen contra la compañera Berta, junto a ella reafirmamos que, los pueblos sabemos y sabremos siempre hacer justicia.
¡Hasta la Dignidad… Siempre Bertita!
Amplio por la Dignidad y la Justicia
Bufete Estudios para la Dignidad